
La codependencia es una dinámica común en las familias afectadas por adicciones. Para muchas personas codependientes, experimentar una autoestima saludable, establecer límites funcionales, asumir su propia realidad y atender sus propias necesidades, puede resultar muy complicado.
Por ello, entender el origen de la codependencia es fundamental para identificar si un ser querido está sufriendo de esta situación. Y en este artículo, profundizaremos en los aspectos que dan inicio a la codependencia, así como en sus consecuencias y formas de abordarla.
¡Sigue leyendo para aprender más sobre este tipo de relaciones de dependencia!
¿Cuál es el origen de la codependencia?
La codependencia se origina en un sistema familiar caracterizado por el abuso, donde el cuidador normaliza el maltrato. Esto puede incluir acciones como golpear con un cinturón, abofetear, gritar o usar apodos despectivos. También se manifiesta en la falta de educación sobre higiene personal (bañarse, usar desodorante o cepillarse los dientes), esperando que el niño se encargue de todo por sí mismo desde temprana edad.
Este vínculo disfuncional también se desarrolla cuando una persona se convierte en «adicta a otra», sintiendo una constante necesidad de ayudarla o controlarla, a costa de su propio bienestar. En estas circunstancias, los niños crecen para convertirse en adultos dependientes, incapaces de ser autosuficientes.
Como resultado, muchos de ellos terminan desarrollando adicciones que pueden poner en riesgo sus vidas a largo plazo. Además, aquellos que generan codependencia hacia familiares adictos pueden enfrentarse a problemas de abuso, baja autoestima y manipulación.
¿Qué es ser codependiente?
La codependencia afecta a aquellas personas que sacrifican su tiempo, esfuerzo o recursos para intentar salvar a amigos, parejas o familiares. Quienes presentan estas características, tienden a relacionarse con personas que enfrentan serios problemas sociales, psicológicos o financieros, ignorando los problemas en sus propias vidas.
Cuando una persona es codependiente, a menudo, siente una presión abrumadora por ayudar a los demás, incluso si eso pone en peligro su propia felicidad. Es como si llevaran todo el peso del mundo sobre sus hombros. Las emociones más comunes en estas situaciones incluyen sentirse lastimados por la falta de reconocimiento, miedo a la soledad y dificultades para confiar en sí mismos.
¿Cuál es la relación entre la crianza y el origen de la codependencia?
A menudo, algunos padres o cuidadores creen que establecer reglas muy estrictas es la única forma de guiar a sus hijos en la «dirección correcta». Les resulta difícil admitir errores o pedir disculpas, ya que lo consideran un signo de debilidad. Además, tienden a subestimar la importancia de los pensamientos y sentimientos de los niños, convencidos de que estos no tienen la madurez suficiente para comprender.
Como resultado, pueden desestimar las emociones de sus hijos diciendo frases como «no debes sentir eso» o «no es para tanto», lo que desvaloriza sus sentimientos y les enseña que está mal experimentar ciertas emociones. Esto puede llevar a los niños a pensar que sus sentimientos no son válidos.
Por otro lado, algunos padres adoptan un enfoque sobreprotector, lo que puede impedir que sus hijos desarrollen las habilidades necesarias para enfrentar situaciones difíciles en el futuro. Asimismo, hay quienes mantienen relaciones demasiado íntimas con sus hijos, compartiendo secretos inapropiados para su nivel de desarrollo.
Por ello, es de vital importancia comprender cómo las formas de crianza influyen en los sentimientos, pensamientos y comportamientos de los niños, incluyendo su vulnerabilidad a desarrollar adicciones a diversas sustancias psicoactivas.
Ayuda a tu ser querido a recuperar su vida. ¡Contáctanos hoy!
Llama ahora para empezar tu camino hacia la recuperación
Origen de la codependencia: 5 señales de alerta
Como hemos señalado anteriormente, uno de los signos más evidentes de la codependencia es la tendencia a priorizar las necesidades de los demás sobre las propias. Las personas codependientes, a menudo, se sienten atraídas por relaciones donde pueden «rescatar» a otros.
Sin embargo, esta dinámica puede generar confusión emocional y dificultar el desarrollo de una autoestima saludable. Además, hay otras características comunes en quienes padecen codependencia, incluyendo:
- Imposibilidad de establecer límites personales.
- Focalización excesiva en los demás.
- Baja autoestima.
- Sentido de responsabilidad alterado.
- Negación recurrente de problemas.
Estos rasgos pueden llevar a la persona a involucrarse en relaciones poco saludables, donde sacrifica su propio bienestar al anteponer el de los demás.
¿Cuántos tipos de codependencia existen?
Existen diferentes tipos de codependencia, cada uno con sus propias características y dinámicas. A continuación, describimos los más relevantes:
- Codependencia de la adicción: este tipo ocurre cuando una persona se enfoca en ayudar a un ser querido con problemas de adicción, ya sea a alcohol, drogas u otras conductas.
- Codependencia de la coexistencia: se manifiesta cuando alguien siente la necesidad de mantener la armonía en una relación para evitar conflictos, a menudo, sacrificando sus propios intereses y necesidades.
- Codependencia emocional: surge cuando una persona se siente responsable de las emociones y sentimientos de otra, buscando complacerla en todo momento.
Como hemos mencionado, independientemente de cuál haya sido el origen de la codependencia, cada tipo presenta patrones de comportamiento únicos, por lo que cada uno puede requerir enfoques de tratamiento específicos.
¿Cómo dejar de ser codependiente?
Recuperarse de la codependencia puede parecer sencillo, pero es un proceso complejo que requiere tiempo, esfuerzo y, en ocasiones, la ayuda de especialistas. Para evitar caer en patrones codependientes, es fundamental que las personas aprendan a sintonizar sus emociones con sus acciones y se alejen un poco de los demás, permitiendo que cada quien se cuide a sí mismo.
Si reconoces la codependencia en un ser querido, es esencial saber que existen opciones de tratamiento, como terapias grupales o familiares. Los enfoques más recomendados incluyen la terapia sistémica, el psicoanálisis y la terapia cognitivo-conductual, que pueden abordar el origen de la codependencia y ayudar a quienes la padecen.
Finalmente, es importante estar consciente de las heridas emocionales de la infancia y poner un alto a las relaciones tóxicas que pueden surgir de estas experiencias no resueltas. Si identificas signos de codependencia, ya sea en ti mismo o en alguien cercano, no dudes en buscar apoyo psicológico.
En Clínica SER, ofrecemos tratamientos tanto para adictos como para sus familias, creando un espacio seguro para explorar y sanar estas dinámicas. Contamos con profesionales capacitados para guiarlos en el camino hacia la recuperación y fortalecer los lazos familiares.
¿Preocupado por un familiar adicto? Llena nuestro formulario y un especialista de nuestra clínica de rehabilitación se pondrá en contacto contigo para brindarte el apoyo necesario. Suscríbete a nuestro boletín de noticias y mantente informado de nuestras actualizaciones y servicios.
¡Transformamos vidas, recuperamos familias!
En Clínica SER, la AYUDA está LISTA
Llámanos al +52 (222) 249-9390 | +52 (222) 231-7574
WhatsApp +52 (221) 349-0308
Psicól. Elizabeth Romero Zarate
Maestría en Adicciones
Terapeuta en Clínica SER
Cédula Profesional 11299915
11 Responses